Es domingo, 5 de diciembre de 1999. Me encuentro en Pulpí (Almería) a punto de entrar en Mina Rica, o también como se la conoce: «Quién tal pensara», ubicada en la Sierra del Aguilón, en busca de minerales, mi gran pasión y afición desde niño.
La Expedición
Aprovechando los días festivos del Puente de la Constitución, un pequeño grupo de amigos pertenecientes al Grupo Mineralogista de Madrid y a la Revista Bocamina, nos hemos trasladado a esta antigua mina de hierro, plomo y plata para conocerla aún más en profundidad.
Esta «expedición» la formamos Gonzalo García (ingeniero de minas y fundador del Grupo Mineralogista), también nos acompaña Fernando Palero (uno de los grandes maestros de la geología en España), Ángel Romero (mineralogista de Almería y gran conocedor de la zona), mi hermano Adrián Cuesta, mi padre José Manuel Cuesta y yo.
Una vez dentro, decidí desviar mi camino de los demás, y en una de las galerías, por casualidad, vislumbré un pozo, me picó la curiosidad, y decidí descender por él. Al llegar a bajo me topé con una pared blanca, muy grande, cubierta por cristal de yeso, totalmente tapada.
Sin pensarlo dos veces, comuniqué a mi padre mi hallazgo, pues aunque no sabía qué se podía esconder tras la pared, aquello tenía muy buena pinta. Soy Efrén Cuesta Infiesta, un asturiano de 20 años, y acabo de descubrir, por una casualidad, la Geoda más grande del mundo.
Lunes, 6 de diciembre
Hoy me he tenido que quedar a hacer guardia a la entrada de la mina, ya que mi hermano Adrián tuvo ayer un pequeño percance con una piedra y no está en condiciones de bajar. Mi madre también nos acompaña.
«¡Cojones, mira lo que hay aquí!»José Manuel Cuesta al mirar por la cavidad
Mi padre ha empezado a retirar las placas de yeso cristalino que, aparentemente, tapaban una geoda incrustada en la pared. De repente, se abre un hueco por el que observa una cavidad totalmente forrada de cristales transparentes, era una Geoda. Rápidamente, mi padre da aviso a sus compañeros Fernando, Gonzalo y Ángel. Todos quedaron maravillados. Era algo único y de gran importancia.
Finalizados los días festivos del puente, cada miembro de la expedición regresamos a nuestros hogares, no sin antes prometer que el descubrimiento no sería revelado bajo ningún concepto por ninguno de nosostros.
Dentro de lo Maravilloso
Estas navidades nos hayamos en Portugal visitando otra mina y allí nos hemos encontrado con Juan Peña, un mineralogista de Sevilla, que nos ha preguntado sobre qué íbamos a hacer con la Geoda descubierta. Nos ha dejado totalmente sorprendidos pues nadie debería saber de ella.
Totalmente consternados y preocupados por saber que alguien podría entrar en la mina, no lo pensamos dos veces y cogimos el coche directos a Pulpí. Recuerdo que durante el trayecto, era nochevieja, justo con la última campanada reventó una rueda de nuestro Land Rover. Jajaja, que manera de entrar en el nuevo milenio.
“Todo estaba inmaculado. Cuando yo entré, la geoda era virgen”.©
Nuevamente en la mina, y dentro de la cavidad, descubrimos que no finalizaba ahí y pudimos abrirnos paso hacia otra cavidad. Nos encontrábamos en el interior de una maravillosa y espectacular Geoda de 8 metros de largo por 2 metros de alto. Es algo totalmente sorprendente.
Te encuentras con una geoda en la que realmente te puedes meter dentro. Aquello era increíble.Efrén Cuesta Infiesta
Otros detalles del Descubrimiento
Primavera del 2000. La Universidad de Almería junto con El Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) entran a la mina «alertados» por mineralogistas almerienses que se hacen eco de la noticia.
Verano del 2000. Comienzas las difamaciones. Los descubridores son tachados de expoliadores.
Nosotros tenemos una afición, que son los minerales, ir a las minas a buscar minerales, no a robarlos.Efrén Cuesta Infiesta
Año 2004. Las minas de Pilar de Jaravía son declaradas Bien de Interés Cultural.
Año 2013. Efrén regresa a la mina. Lo que se encuentra, nada tiene que ver con lo que él vio el día de su descubrimiento. Todo estaba lleno de polvo negro y blanco, cristales machacados por las pisadas y faltaban los cristales más destacables.
Algunos sacrílegos intentan cortar, aunque de forma infructuosa, cristales de yeso. Ante el peligro que esto podría ocasionar, ya que la mina estaba abierta de par en par, el experto Javier García-Guinea del CSIC y el geólogo José Mª Calaforra de la Universidad de Almería dan alerta y se precinta todo el recinto prohibiendo el acceso al mismo.
El 23 de enero de 2019, la Organización Nacional de Ciegos Españoles (ONCE) dedica su cupón, del sorteo diario, a la Geoda de Pulpí. Uno de estos cupones es guardado «como oro en paño» por Efren, aunque no recuerda si aún conserva por casa el mono azul que llevaba cuando entró por primera vez en la Geoda.
El 5 de agosto de 2019, la Geoda de Pulpí abre sus puertas al público y es posible su visita. (Ver Post)
El 15 de febrero 2022, la Geoda de Pulpí y Mina Rica de Pilar de Jaravía son declarados Monumento Natural por la Junta de Andalucía.
Formación de la Geoda
La Geoda de Pulpí es una estructura geológica única en el mundo. Se trata de una cavidad subterránea, a unos 60 metros de profundidad, de unos 8 metros de diámetro, cuyas paredes se encuentran tapizadas por minerales cristalizados, de hasta 2 metros de longitud, en la que permanece un hueco en su interior. La morfología de las geodas suele ser esférica u ovoidal.
La formación de la Geoda de Pulpí se remonta a unos 5 millones de años, durante el periodo del Mioceno, cuando la zona donde se encuentra actualmente estaba cubierta por el mar Mediterráneo. Durante este periodo, se produjo una intensa actividad tectónica que elevó la zona, dando lugar a la formación de la Sierra del Aguilón.
Se podría explicar en dos etapas básicas (ambas en ambiente subacuático pues la Geoda estuvo inundada por agua subterránea durante todo el proceso de su formación) que serían:
- Formación del Hueco
Durante el Plioceno, el agua de lluvia y de los ríos comenzó a filtrarse a través de las rocas calizas que cubrían la zona. Esta agua, rica en sulfato cálcico, se fue acumulando en una cavidad subterránea, disolviendo lentamente la roca caliza (Proceso de karstificación). - Formación de los Cristales
En el Pleistoceno, el techo de la cavidad se derrumba, dejando al descubierto la estructura interna de la misma. A partir de ese momento, comienza la formación de los cristales de yeso (mediante un modelo mixto kárstico-hidrotermal), que se va depositando lentamente en el interior de la cavidad durante 165.000 años (datado por la Universidad de Almería).
Se debe tener en cuenta que los cristales de yeso de la Mina Rica nada tienen que ver con otros yesos como las rocas evaporíticas del Karst en yeso de Sorbas (Messiniense, 6 millones de años) con los que frecuentemente se suelen confundir genéticamente. Por lo que se trata de una estructura geológica única en el mundo, de gran valor científico y turístico.
Es un premio a toda una vida dedicada a los minerales, un premio no solo para mí, sino también para mi padre, que fue la persona que nos metió en este mundo.Efrén Cuesta Infiesta