Summit One Vanderbilt se ha convertido en una de las atracciones más demandadas e impresionantes de Nueva York. Recientemente inaugurado (octubre de 2021), este rascacielos se alza al lado de la icónica Grand Central Terminal con una altura de 427 metros, situándolo entre uno de los edificios más altos de la ciudad. Pero lo que realmente lo diferencia es su plataforma de observación inmersiva y multisensorial, conocida como «SUMMIT».
Historia
El proyecto de One Vanderbilt, incluido el Summit, es el resultado de una colaboración entre el desarrollador SL Green Realty Corp y la firma arquitectónica Kohn Pedersen Fox. Desde su concepción, el objetivo era crear no solo un edificio impresionante sino también una experiencia que fuera más allá de una simple plataforma de observación.
La idea detrás de Summit fue integrar arte, tecnología y paisajes impresionantes de la ciudad de Nueva York en una experiencia única. Con la colaboración del diseñador Kenzo Digital, se desarrolló una serie de instalaciones artísticas y tecnológicas que desafían la percepción y ofrecen una nueva manera de ver la ciudad.
Dentro del Summit One
Tienes varios accesos para entrar, nosotros lo hicimos por la entrada lateral contigua a Gran Central Terminal. Una vez dentro, la experiencia comienza con la subida en ascensor (los efectos de luz y sonido son impresionantes). Cada aspecto de la visita está cuidadosamente diseñado para sumergirte en un mundo surrealista e interactivo.
A continuación, te detallamos nuestra experiencia planta por planta. Por temas de seguridad y climatología (niebla), no pudimos acceder a la planta 3, por lo que sólo estuvimos en las dos plantas de los pisos 91 y 92.
Planta Piso 91
Llegamos al primer nivel (Planta 91) de la experiencia Summit One, que nos muestra una introducción visual y sensorial al mundo inmersivo que lo caracteriza. Este piso combina elementos de diseño futurista y tecnología de vanguardia para crear una experiencia multisensorial.
Air Transcendence 1
Lo primero que nos encontramos es la zona más icónica y de las más fotografiadas (Transcendence 1), diseñada por Kenzo Digital, que no es otra que la planta de espejos. Las paredes, el techo y el suelo están revestidos con espejos, creando un efecto de infinito maravilloso y a veces vertiginoso. El juego de luces y reflejos genera una sensación de estar flotando en un espacio sin fin. Muy, muy bonito.
Aquí los amantes de la fotografía están de suerte pues este lugar te permite capturar imágenes impresionantes jugando con los reflejos y panorámicas de new york.
Reflect
Continuamos a la siguiente sala: Reflect. Una sala brillante, donde el sol de Nueva York (nosotros no tuvimos esa suerte) se refleja en las superficies de metal, y donde los reflejos de las personas y la ciudad crean un ambiente dinámico. Este espacio cambia a lo largo del día, adaptándose a la luz natural y proporcionando una experiencia siempre en evolución.
Aquí, las personas se convierten en parte del arte, ya que sus imágenes y movimientos contribuyen al efecto visual colectivo. Es un lugar ideal para disfrutar de una sensación de calma mientras te rodean los reflejos del cielo y la ciudad. Yo en cambio tenía la sensación de que en un momento dado, de esos pegotes de «metal fundido» saldría la figura transformadora del T-1000 para liquidarnos a todos jejeje. (Ver Película Terminator 2: El Juicio Final)
Affinity
La siguiente sala es la Affinity, aquí se lleva la interacción al siguiente nivel. En este espacio, esferas de vidrio flotan y puedes tocarlas, lanzarlas, golpearlas, creando un ambiente lúdico e interactivo. Las esferas parecen tener vida propia, moviéndose y respondiendo a tus movimientos de manera inesperada.
Este espacio, diseñado también por Kenzo Digital, juega con la conexión emocional y física, brindando una experiencia sensorial única. (Disfrutarás como en tus años de infancia).
Planta Piso 92
Terminada la visita, continuamos y subimos a la siguiente planta. En este piso es donde la adrenalina se combina con el arte, proporcionando un nuevo punto de vista de la ciudad.
Air Transcendence 2
Lo primero que nos encontramos es la continuación de Transcendence, el espectáculo visual que comenzó en la planta de abajo. Aquí, experimentarás una extensión más amplia del mundo de los espejos con un toque distinto: la elevación y las vistas se vuelven más impresionantes.
Este nivel crea una sensación aún más poderosa de infinito, jugando con la luz, el espacio y el movimiento de las personas. Un área que invita a continuar disfrutando del arte inmersivo.
Levitation
Pasamos a la siguiente sala: Levitation. Aquí ya comienza lo bueno, jejeje, pues es una de las atracciones más emocionantes del Summit. Se trata de plataformas de vidrio que sobresalen del edificio, suspendidas a más de 300 metros de altura. Aquí, si no te tiemblan las piernas, puedes caminar y mirar directamente hacia abajo, obteniendo una vista incomparable de la ciudad de Nueva York desde una perspectiva que desafía el vértigo.
Caminar sobre el vidrio, con el tráfico y los peatones de Manhattan allá abajo, es una experiencia y sensación llena de adrenalina y sin duda un punto destacado de la visita. Aunque nosotros, por temas de la niebla, no pudimos verlo en todo su esplendor, la sensación que aportaba el ver o no ver acrecentaba más aún las sensaciones.
Air: Unity
Ya por último la sala Unity, un espacio reflexivo y artístico que conecta con otros a través de la luz y el color. Aquí, las interacciones humanas son reflejadas en patrones de luz, creando un entorno visualmente estimulante que reacciona a la presencia de las personas. Así como el poder contemplar tu rostro convertido en nubes en donde parece que estás volando.
Impacto turístico
No cabe duda que Summit One Vanderbilt se ha convertido en una de las atracciones turísticas más importantes de Nueva York (sólo hay que ver las tremendas e inmensas colas que se forman para poder entrar). La combinación de tecnología avanzada, arte inmersivo y vistas panorámicas lo convierte en un destino obligado para aquellos que buscamos algo más que los puntos tradicionales de la ciudad, como el Empire State Building o el One World Observatory. Aunque con tiempo y una buena estructuración de rutas puedes disfrutarlo y experimentarlo todo.