Despertar impaciente, al amanecer. Sin dar tregua al tiempo, para dar un salto enérgico de la cama, abrir la ventana de nuestra habitación y dejar pasar los primeros rayos de luz del día. No ha sido difícil madrugar, la emoción de nuetra primera vez no nos facilita conciliar el sueño.
Hemos llegado a la isla de madrugada y la oscuridad de la noche, no nos ha permitido contemplar ese abismo de belleza a la caldera del volcán, que la privilegiada ubicación del Hotel Kasimatis by la Perla nos va a regalar cada día.
Tras el revuelo de estas primeras sensaciones, viene la calma. El desayuno, servido cada mañana, en la terracita de nuestra habitación, contribuye a empezar el día con serenidad pero con mucha energía.
Para leer + tarde
¡Comenzamos a disfrutar de la espectacularidad de Santorini!
Imerovigli
Hoy decidimos, quedarnos en el pueblo de Imerovigli. Nuestra planificación es relajada, dando pie a la exploración espontánea. Perdernos entre sus escalonadas callecitas es nuestro primer plan y ¡pinta muy bien!
Le Moustache Caldera Pool Lounge & Restaurante
Justo al lado de nuestro hotel, descubrimos Le moustache, un restaurante con vistas a la caldera. Además de poder comer o cenar, se puede reservar una hamaca y disfrutar del baño, disfrutando de una de las más idílicas postales de Santorini: la piscina infinita.
Callecitas del pueblo
En sentido contrario a la caldera, a las espaldas de los hoteles, las calles nos conducen a las viviendas de los aldeanos. Es muy bonito ver la vida local de sus habitantes y la arquitectura autóctona. Es importante respetar los accesos, pues la mayoría son callecitas de viviendas privadas. Y por favor, respetar las prohibiciones de subir a los tejados para haceros una foto, no todo vale.
Roca Skaros
Intentando llegar a la roca Skaros, damos muchas vueltas, subimos escalones, bajamos, los volvemos a subir… Si “todos los caminos llevan a Roma”, los de Santorini te llevarán a tu destino, pero tras muchos peldaños en el trayecto. Más vale llevar agua y paciencia, porque la conexión a google maps puede que no te acompañe.
Pronto damos con el sendero correcto. Para bajar a la roca, nosotros bajamos por la esquina del hotel Varoulko. Hay muchos tramos que te llevan a ella, depende de la zona por la que procedas.
El trayecto de 1,5 km aproximadamente no es difícil de realizar. Es recomendable llevar calzado cómodo, agua y evitar las horas de más calor.
Las vistas durante todo el trayecto son alucinantes e indescriptibles, si te gusta la naturaleza y los paisajes volcánicos. Disfrutarás muchísimo con la peculiaridad y espectacularidad paisajística de este lugar con energía propia. Estás adentrándote al centro de la caldera en un punto geográfico privilegiado para contemplar la forma semicircular de la isla. Tal vez las mejores vistas de Santorini. Para nosotros lo son.
Además, si te gusta la historia, te gustará saber que en este promontorio existía una fortaleza, testimonio impresionante de la arquitectura y la ingeniería veneciana del S XV. Albergó multitud de casitas a su alrededor, llegando a ser la capital de Santorini.
Las fuertes erupciones del S. XVIIII obligaron a los habitantes a desplazarse a otros puntos de la isla. Los terremotos que sucedieron, derruyeron las viviendas, quedando únicamente en pie una iglesia, que a día de hoy se puede contemplar ( Iglesia Saint John the Beheaded or Katiforis). Aunque hay que cruzar una zona no recomendable por peligro de desprendimiento. Nosotros no fuimos a verla.
La subida siempre se hace más dura, por eso al completarla, nos damos nuestro merecido descanso tomándonos un cóctel en uno de los numerosos restaurantes que hay en la zona con vistas a la roca. Vida de reyes, no podía ser de otra forma después de visitar el emplazamiento de este antiguo castillo, jejeje.
Iglesia Church of the Resurrection of the Lord
Otro de los puntos clave de Imerovigli es la iglesia Church of the Resurrection of the Lord.
Menos masificada que las cúpulas de Oía y no menos bonita. Aquí nos encontramos con una sesión de fotos con los típicos vestidos voladores.
Es un escenario ideal para hacer fotos. Está bastante céntrica y no es difícil encontrarla pues queda de paso en el camino que lleva de Imerovigli a Fira.
Restaurante Avocado
Para comer paramos en el restaurante Avocado, más al centro del pueblo, sin vistas a la caldera, pero con muy buenas críticas. Fue buena elección. Comida muy rica y buena relación calidad precio. El pulpo, el marisco y el pescado delicioso. (Lo que dispara la cuenta en todos los restaurantes son las bebidas, por ejemplo, una botella de agua nos costó 6 euros).
Descanso en el hotel
Decidimos tomarnos la tarde sin hacer ruta. Estamos cansados del viaje y es el momento perfecto para descansar, disfrutar del yacuzzi del hotel y tomarnos un coctel en la piscina. Combinar las excursiones con descanso también es importante en las vacaciones.
Restaurante Ammilos
Culminamos el día con una cena en el Restaurante Ammilos, situado en la parte más alta de nuestro hotel.
Para dar la bienvenida a nuestro primer atardecer en Santorini, elegimos en carta y degustamos elaboraciones muy sabrosas, que por supuesto acompañamos con vino autóctono. Nuestro primer brindis a la puesta de sol.
El día nos ha parecido precioso, despedirlo así, lo hace aun más especial. Pensábamos que sería dificil superarlo y ciértamente lo es. Pero en Santorini hemos experimentado que es imposible comparar experiencias, no hay dos días con el mismo color, ni con las mismas sensaciones. Si se acaba uno bonito, el siguiente será diferente pero igual de espectacular.
El tiempo es una gota de agua en el mar y una gota no se puede comparar con otra para ver cuál es mayor.Elif Shafak