Mantli

Nos encontramos en el Hotel Azulik y más concretamente en su sala exclusiva de mezcal «Mantli» para realizar una de las actividades que más ilusión me hacía desde que programamos nuestro viaje a Tulum y más concretamente la estancia en este hotel, y es sin duda la Experiencia Mantli, que consiste en la cata de 3 mezcales tradicionales del estado de Oaxaca.

Pero antes de nada, lo más lógico es ponernos en contexto e introducirnos en el nuevo y maravilloso e inexplorado mundo del Mezcal. También dispones de un genial post de historia del Mezcal donde profundizamos más en esta fabulosa bebida de dioses.

El Mezcal

Proviene del náhuatl (lengua indígena mexicana) «Metl» (maguey o agave) y «ixcalli» (cocido), lo que describe el proceso de cocción del corazón del agave, o piña, que es el primer paso para la creación de esta bebida.

Este destilado, conocido por su sabor complejo y su proceso de elaboración artesanal, es mucho más que una simple bebida alcohólica; es un símbolo cultural y espiritual que ha acompañado a las comunidades indígenas a lo largo de milenios.

Mantli: Templo del Mezcal

La palabra Mantli proviene de la fusión la palabra Madre en dos idiomas: Español y Náhuatl (Nantli). Madre + Nantli = Mantli.

Como ya os he comentado antes, Mantli es un local dentro del Hotel Azulik, justo en mitad del puente colgante que une los restaurantes de Kin Toh y Tssen Ja, destinado sólo y exclusivamente al Mezcal.

Un espacio, donde se rinde homenaje a la planta de maguey, el corazón del mezcal. Aquí podrás degustarlo tanto en cocktail como en estado puro, bien acompañado, si lo deseas, de un sorprendente maridaje.

Cada detalle fue meticulosamente elaborado para crear una atmósfera donde los sabores, aromas y sonidos se entrelazan para crear una experiencia única inspirado en las tabernas típicas mezcaleras de Oaxaca y que no le falta detalle con su imagen de la Virgen de Guadalupe.

Experiencia Mantli

La experiencia consiste en la degustación de tres mezcales artesanales de Oaxaca, maridados con elementos locales cuidadosamente seleccionados (sales, mermeladas y/o cítricos). Su precio es de 1.800 mxn (unos 83€ al cambio). Puede parecer caro, pero en conjunto: lugar, experiencia y producto lo veo bien.

El mezcal no se toma, se besa.Dicho popular mezcalero

Para el maridaje la experiencia conlleva varias sales, mermeladas y cítricos con los que potenciar los aromas y sabores del mezcal en tu paladar, tales como sal de Chiplote, rodajas de limón, Flor de Jamaica en almíbar, sal de Chapulines (saltamontes) o sal de Gusano maguey y bombones de chocolate entre otros. Jajaja, todo un reto saber que estas comiendo gusanos o saltamontes… jejeje pero todo genial.Al contrario de la tradición tequilera de tomarlo a trago, en Oaxaca se recomienda beber el mezcal a pequeños sorbos; de ahí que se suela decir que el mezcal se toma “a besitos”. Esto se debe a que es una bebida de alta graduación, de 48 a 50 grados y por más que el maguey sea silvestre y el maestro sea extraordinario en su elaboración, si se toma directo, tus sensaciones van a ser de haber bebido alcohol puro y no percibirás notas de sabores por ningún lado.

Para la cata se recomienda dar un pequeño sorbo (sólo mezcal) y mantenerlo en boca y degustarlo un poco, no tragarlo directamente. Luego, puedes hacer lo mismo pero ya con el maridaje. Tomas un poco de mezcal y sin tragarlo aportas el cítrico con las sales o el chocolate. Cada uno te aportará un impresión y un sabor diferente al mezcal.

Mezcal Vago Espadín Ensamble en Barro

Mezcal Vago Madre Cuishe

Mezcal AZVLIK Ensamble Jabalí

Mezcal Cuish Tepeztate

Mezcal El Jolgorio, Pechuga