En un rinconcito del barrio murciano de «Vistalegre», el abaranero Rafael Sánchez, una de las promesas de la cocina de la Región de Murcia, nos presenta su proyecto gastronómico «Boxperience«.
De ambiente tranquilo y acogedor, diseño conceptual acorde con los menús de temporada presentes en carta, Rafael, formado entre los fogones de Martín Berasategui, Robin Food o de los hermanos Adriá, nos presenta una cocina internacional de raíces murcianas fusionada con pequeñas pinceladas asiáticas.
En este viaje estelar, nos acompaña muy amablemente Natali, ella será nuestra comandante a lo largo de nuestro viaje gastronómico. Nos presentará la carta que contiene dos menús degustación, uno de 40€ «Pass to Present | Menú Remember» y otro de 60€ «Earth to Heaven | Menú Andrómeda». Nuestra elección fue decantarnos por el menú Andrómeda.
En este viaje interestelar de creaciones, comenzamos en el «Cosmos«: versión esferificada del mítico cóctel «Cosmopolitan». Una delicia para abrir boca.
Continuamos surcando sabores y sensaciones con «Gagarin»: trampantojo de Piruleta con foie en vinagre de frambuesa. Una consecución fantástica y un sabor increíble.
Surcando la galaxia de Andrómeda, divisamos nuestra «Vía Láctea»: mantequilla de huevas de mújol en semisal de baja curación. Excelente composición y combinación, la intensidad del mújol está en su justa medida y cremosidad.
Pasada la Vía Láctea, y continuando con nuestro viaje, sufrimos un inesperado «Efecto Yarkovsk»: gazpacho con emulsión de aceite de albahaca con grumitos de pimiento rojo y verde. Un plato fresco, ligero y refrescante.
En nuestro camino, y con una órbita ascendiente hacia nuestra nave, se aproxima a impactarnos una «Croqueta Estelar»: croqueta de jamón y panko kimchi, rebajado en aceite para hacerlo más saludable. De las mejores croquetas que he probado, cremosa y el crujiente espectacular. Lo mejor de todo, la ausencia del aceite «fritanga».
Por los arrabales de Saturno, nos encontramos con el magnífico «Mejillón Saturniano»: mejillón en escabeche con emulsión de piparra, cebolla esculpida en cítricos y apionabo. Exquisito, un bocado fantástico.
Allá a lo lejos, nos ciega un brillo abrasador, estamos contemplando una «Super Nova» : caballito rebozado en corteza de cerdo y salsa kewpie mayo picante. Lo mejor de lo mejor. Sin lugar a dudas, he encontrado el mejor caballito hasta la fecha. Una auténtica pasada.
Recuperados, nos informan del impacto, de hace 80.000 años, de la pieza de hierro natural más grande de la superficie terrestre. Estamos hablando del «Meteoro Hoba»: trampantojo de Gofre de queso parmesano con reducción de Pedro Ximénez. Al contrario que su homónimo, éste se deshace en boca con un exquisito sabor a parmesano.
Desde el espacio exterior, en la nave U.S.C.S.S. Nostromo, nos llega el «Octavo Pasajero»: anguila ahumada caramelizada sobre wakame con foie y gelatina de frambuesas. Uno de los platos que más me ha sorprendido. Sabor, texturas y emplatado expectaculares.
A punto de finalizar nuestro viaje, divisamos el «Globo Terráqueo»: espuma de parmesano caliente, acompañado de una esferificación de ñoquis con trufa, crujiente de pan, polvo de berenjena tatemada y aceite de trufa y albahaca. Maravilloso el sabor del parmesano junto con el de la trufa y el matiz de la albahaca para darle ese puntito de frescura. Una auténtica delicia.
Tras nuestra andadura estelar, volvemos a nuestra «Nave Nodriza»: Taco de chato murciano en base de kewpie mayo, cebollas encurtidas en cítricos y pepino. Muy rico, la combinación del chato con la salsa de un auténtico escándalo. Me recordó mucho en sabor a los verdaderos tacos mejicanos que pudimos probar por nuestra andadura de Riviera Maya.
Como plato principal de nuestro viaje, tenemos que elegir entre «Steak» o «Selenita». Seleccionamos «Selenita»: Atún cocinado a baja temperatura con grasa de jamón de bellota, base de verduritas salteadas y salsa Kung Pao. Se acompaña con varias salsas: salsa wakame, salsa de piparras, salsa de frutos rojos y salsa picante. Espectacular, una auténtica maravilla. El atún en su punto exacto.
Antes de nuestro final, sobrevolamos la esponjosidad de la «Luna»: Paparajote 3.0 (sin hoja de limonero) versionado con tortada murciana y crema de yema tostada en su interior adornada con merengue suizo. Postre de gran calidad, nada empachoso y una delicia para el paladar.
Finalizamos el viaje, y que mejor que recordando la belleza de las «Nebulosas»: Mini gintonics servidos en tubitos de ensayo. Detalle muy chic para dar por finalizado este viaje gastronómico maravilloso.
Rafael junto con su personal, y en apenas un año desde su apertura, viene pegando fuerte y seguro que dará qué hablar en un espacio no muy amplio de tiempo. Prueba de ello, las innumerables firmas de famosos, a nivel nacional e internacional, que adornan parte de la pared del establecimiento, y que ya se han deleitado con sus creaciones.
Deseamos que sea uno de los muchos que coloquen a la Región de Murcia en el panorama gastronómico nacional que se merece. Claro está, que si sigue por este camino, lo puede conseguir.