Ya en tiempos de los romanos el puerto de Cartago Nova contribuyó al esplendor de la ciudad, ahora el Restaurante Alviento, próximo a cumplir su primer año desde su botadura (8 de septiembre de 2022), se erige como un auténtico templo de la cocina mediterránea.

Alviento. El Restaurante
De la mano de Alfonso Torres, dueño de Trips, y el fabuloso diseño del interiorista Arturo Rubio nos presentan un espacio moderno y elegante que no solo ofrece un entorno acogedor, sino que también actúa como un lienzo en blanco que permite que los colores y las texturas de los platos brillen con aún más fuerza.

La estética minimalista acentúa la atención en la verdadera estrella: la variada oferta de ocio y gastronomía (Heladería Artesanal, Espacio Estrella Levante y Discoteca).

Tenemos una oferta revolucionaria: con un local avanzado, moderno y muy diferente a lo que se ha visto hasta ahora en nuestra ciudad. Alfonso Torres
Cocina Alviento
El restaurante se alza en una ubicación privilegiada, en el mismo paseo marítimo del Puerto de Cartagena, como faro que guía a los comensales a través de una experiencia gastronómica excepcional. La armonía que ofrece sus vistas al mar convierten cada plato en una sinfonía sensorial de sabores y aromas característicos de la región.

El compromiso inquebrantable con los ingredientes de mercado y de la región frescos y de calidad es el alma de Alviento. Cada plato (pescados, mariscos, arroces y carnes) es una celebración de los tesoros que ofrece la tierra y el mar, elaborados con maestría para resaltar su esencia intrínseca.

El personal parece ser embajador de la hospitalidad mediterránea y cartagenera, brindando al comensal un servicio atento y amable que eleva nuestra experiencia a otro nivel.
Quim Gabarro Larios. Chef Ejecutivo
El de Manresa será el chef ejecutivo de este nuevo proyecto. Desde los 16 años está entre fogones. Estudió en la Escuela de Hostelería Joviat en Manresa, trabajó en el restaurante Els Noguers y luego pasó por el Velódromo de Barcelona (una Estrella Michelin de Jordi Vila). Pasó por la etapa de ganar la segunda Estrella y la tercera Estrella Michelin en ABaC de Jordi Cruz (3 Estrellas Michelin).

Degustando la Carta
Una vez contemplada la amplia carta que nos ofrece Alviento, y tras una ardua decisión para qué platos degustar (hemos decidido pedir sólo a tapeo) y cuales dejar para la próxima, solicitamos un Mar de Frades DO Rías Baixas. Albariño 100% de color limón pálido. Refrescante y suave con aromas a frutas tropicales y notas de menta. Delicioso. Un clásico siempre presente.

Comenzamos con un snack de bienvenida: Buñuelo negro de calamar en su tinta y salsa de cítricos. Espectacular. Delicioso. Un bocado que se «deshace» literalmente en tu boca. Una delicia.

Continuamos nuestra andadura con unas Anchoas 00 con pan de algas y mantequilla de plancton. Una maravilla. Anchoas carnosas con sabor intenso a mar. El acompañamiento del pan y del plancton no ensombrecen a la anchoa, más bien la intensifica. Increíbles.

Al verlas en carta no podía dejar pasar la tentación, así que el siguiente aperitivo es una Ostra con mantequilla de plancton. Una delicia. Impresionante, aunque yo el plancton lo serviría o líquido o en granizado sobre la ostra, creo que le vendría mejor.

Seguimos con una Ostra con granizado de Bloody Mary. Ohhhh, dios!!! que locuraaa!!. Toquecito picante del bloody Mary aporta e intensifica el sabor. De locos!

Terminadas las ostras, aún lloro al pensarlo, seguimos nuestra andadura con unas Navajas a la brasa con mayonesa de kimchee y curry rojo. Deliciosas. Me sorprendieron gratamente pues no había tenido muy buenas experiencias con este tipo de cocinado en otros lugares. Para repetir.

Seguimos «marisqueando» con unas Vieiras a la carbonara con velo de parmesano, papada, salsa de yema y aceite de trufa. Exquisito. Me encantan estos «tierra-mar» tan sutiles que a veces se pasan por alto. Pero la combinación es perfecta. Una auténtica delicia.

Como principal, y dado que el pan que nos sirvieron estaba de auténtico infarto, no vendría mal un Huevo a baja temperatura con parmentier de patata trufada, virutas de mojama y espuma de queso parmesano. Mención aparte y premio gordo para el espectacular emplatado en una bellísima ánfora romana. Exquisito.


Para el postre, decidimos compartir un Helado de violeta y vainilla con merengue seco, texturas de yogurt y arándanos. Una pasada. Delicioso. Como diría Arguiñano: «Rico, rico, rico».

Para terminar, y estando en la ciudad que lo vió nacer, nada mejor que un delicioso Asiático. Una maravilla. Una preparación perfecta. Un sabor único e inigualable.

El Restaurante Alviento es un viaje culinario que rinde homenaje a la rica herencia gastronómica marítima cartagenera. Un rincón donde cada plato cuenta una historia y cada visita se convierte en un recuerdo inolvidable. Volveremos.
