Nos encontramos en ODISEO, Murcia, un centro en el que puedes optar a diferentes ambientes en los que poder dar rienda suelta a tus gustos (Gastronomía, Terraza, Disco y Juegos de Azar). Todo ello en un marco arquitectónico incomparable de lujo y distinción, coronado con la piscina en voladizo más grande de Europa.
En la segunda planta se encuentra su reconocido Restaurante de cocina mediterránea y fusión, que cuenta, en su interior, con el espacio Estrella Michelin donde Nazario Cano expresa toda su fantasía.
En nuestro caso, hemos tenido la distinción y el honor de poder asistir a una cena de navidad de nuestros queridísimos amigos. Siempre de agradecer y todo un detallazo. Gracias y siempre gracias.
En El Odeón, tienes la opción de carta y/o elección entre tres menús: “Lucky” (60€ + opción maridaje 40€), “Indagando en la Cocina” (90€ + opción maridaje 90€) y “En Estado Puro” (145€ + opción maridaje 110€). En este caso, el menú seleccionado fue “Indagando en la Cocina” sin maridaje, pero bien acompañado por un sauvignon blanc.
En primer lugar comenzamos con unos snacks. Los tres snacks estaban deliciosos.
Para leer + tarde
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Seguidamente, “Tomate Marino y Pulpo en Salazón”. Una delicia, la combinación de la esferificación junto con el caldo es un alucine. El pulpo no es para tanto, muy normalito.
Continuamos con “Dumpling de Ensaladilla de Guisante y Gambita”. Un plato que sorprende por su gusto y texturas. Muy suave.
Pasamos al siguiente plato, “Lujo”. Como bien indica su nombre, todo un lujo de sabores. Espectacular.
Seguimos esta vez con una “Horchata de Maíz, Espárragos y Almeja”. Una auténtica maravilla y delicia. Sabor bien logrado y un emplatado que me gustó mucho, ya que me recordó a las piedras volcánicas que tenemos en casa.
Continuamos con una “Flor de Calabacín, Calabaza, Queso Ahumado y Caviar”. Muy bueno. La salsa muy suave y no notas nada el sabor a calabaza. Muy bien fusionado.
Estando en tiempo navideño, no podía faltar un guiño con un “Turrón de Cigala, Hinojo de Mar e Hinojo de Tierra”. Un plato exquisito en todo su conjunto. La cigala bien cocinada en su justa medida.
Continuamos con un “Tomate ‘partío’ de la Huerta Murciana”. Plato muy correcto con buen sabor.
Posteriormente nos llega un “Arroz de Galera, Anguila Ahumada y en Regaliz”. Uno de los platos que más me sorprendió y disfruté. Un arroz muy suave en boca con recuerdos al suquet valenciano. Una auténtica pasada.
El siguiente plato, “Cacao de Lubina”. Lubina bien cocinada con un buen sabor junto con la salsa. Muy suavecita.
Finalizado el anterior, nos llega una “Ventresca Infiltrada y Ahumada en Regaliz con Civet”. Único plato que no me gustó. Tanto el sabor como la textura, muy gelatinosa, para aquellos que no estamos muy acostumbrado a estos sabores.
Para culminar el menú, y antes de los postres, pasamos a “Caza y Morcilla de Arroz”. Plato muy sabroso, la carne en su punto y una salsa consistente pero sin sobrepasar al conjunto de sabores ni al elemento principal. La morcilla muy suavecita, nada que ver con la tradicional de Burgos que la estas repitiendo semanas después.
Finalmente, llegamos a los postres. Aquí nos lo sirvieron todo junto, se vé que tenían prisa por terminar o que nos marcháramos: “Campanelle de Apio Bola y Stracciatella de Aceituna Negra”, “Alcachofa y Helado de Haba Tonka” y “Milhoja de Berenjena, Limón y Mantequilla Tostada”. Todos buenísimos, no defraudaron y muy refrescantes para terminar.
He querido dejar para el final mi valoración tanto del local como de la atención recibida.
Siendo consciente que un lugar como Odiseo, y más en Murcia, donde lugares de índole glamurosa y lujo por doquier no proliferan mucho, incita a la llegada de personas para el simple hecho del famoso “postureo”.
Todo esto es muy lícito y no pongo inconveniente, pero si el deseo del local no va en esta dirección, debería cuidar mucho e intentar eliminar el “tótum revolútum” que es ahora.
Esta situación se da en la segunda planta, donde está el Restaurante con el espacio Estrella Michelín. En la zona de ascensores se forma tal aglutinamiento de personas que bien podría ser nominada a los Oscars en una nueva adaptación de “El Camarote de los Hermanos Marx”.
Señores de Odiseo, una experiencia Estrella Michelín no se basa en el simple y llano concepto «como, pago y me voy», eso no vale nada si no puedes disfrutar de una velada con tu pareja o grupo de amistades riendo, hablando y saboreando al mismo tiempo los magníficos platos que te presentan.
El Lujo y el Glamour que tanto profesan no se obtiene de luces de neón ni suelos con moqueta. La atención y el saber estar hacia el cliente desempeña un papel fundamental. Sin esto, seguirán siendo lugar de foto fácil y “postureo”.